Gin Tonic, un clásico renovado... para todos los públicos

Gin Tonic, un clásico renovado... para todos los públicos

En los últimos años hemos asistido impertérritos al vertiginoso ascenso de este sencillo, que no simple, cóctel que, sin dejar nunca de ser un clásico ha sabido actualizarse siempre con la aparición de innumerables y sofisticadas ginebras, alguna que otra tónica y recetas y aderezos para todos los gustos: pepino, pétalos de rosa, regaliz, perejil, manzana, albahaca, algas, pimienta, pomelo...y por supuesto, lima y limón.

¿Su secreto? es una combinación que se puede adaptar a todos los paladares, aunque no te guste la ginebra ni la tónica.

También sobre su origen existe cierta mística que lo sitúa junto a las tropas del Imperio Británico en la India en su afán por librarse de la malaria. Pero lo mejor es olvidar todo eso y disfrutar de esta maravillosa combinación que es ideal, si la preparamos ligera,  como aperitivo, para después de una comida, por la noche... o a media tarde, ¿quien se resiste a un "Gin Tonic a las 7"?

Dar normas estrictas siempre es complicado, mucho más si hablamos sobre cómo preparar una copa... pero aún así, deberíamos tener claros los siguientes conceptos: 

• El vaso o copa debe ser amplio, transparente y siempre de cristal más o menos fino... una buena definición podría ser algo así como "lo menos parecido posible al típico vaso de tubo de toda la vida".

• El hielo debe ser muy frío(sin duda, un certero apunte si hablamos de agua congelada, pero me refiero a que debe estar más cerca de -20º que de -1º), de buen tamaño,abundante y de excelente calidad, es decir, no es necesario hacerse con un "pica hielos" y vivir cerca de un glaciar milenario, es suficiente con que no aporte ningún sabor. Si es transparente, mucho mejor.... si hervimos bien el agua antes de hacer el hielo obtendremos unos cubitos absolutamente cristalinos.

• Por supuesto, la Ginebra y la Tónica deben ser de alta calidad, olvida marcas blancas y ofertas sospechosas, y la proporción, que siempre podremos ajustar a gusto del consumidor, será de 1 parte de ginebra por cada 4 o 5 partes de tónica. Y mucho mejor si estos dos elementos están muy fríos, la ginebra podemos guardarla en el congelador, para no aguar la mezcla.

• A la hora de aderezar nuestra copa con cítricos, léase lima o limón, debemos apostar por retorcer o "exprimir" (los expertos lo llaman hacer un "twist"), la piel, que aporta el aroma, pero no la extrema acidez de su zumo, el cual, tras arruinar incontables Gin Tonics, creo que ha sido puesto en "busca y captura" por orden del juez Garzón...

• Respecto a las tónicas hay varias muy recomendables: Scheweppes, Fever Tree, Fentimans, Abbondio, 1724, Q-Tonic, Boylan… cada una con su toque personal.

Todo esto no tiene sentido sin pasar a la práctica…

• Marineros

Fifty Pounds con algas y plancton

El chef Ángel León, del restaurante gaditano Aponiente (1 Estrella Michelin) ha creado el “Gin Tonic del Mar” añadiendo plancton y algas de la variedad Salicornia que le otorgan, además de un color verde Atlántico, un sabor yodado y a salitre que nos muestra la esencia del océano. Fifty Pounds, una ginebra clásica, muy equilibrada y redonda en la que no sobresale ningún botánico combina perfectamente

• Modernos

Bulldog con regaliz

La ginebra Bulldog, una de las  más actuales y modernas, y que presume de ser “sexy”, gracias a sus ingredientes a sus sofisticados ingredientes, que incluyen amapola, ojo de dragón, angélica, hojas de loto o raíz de lirio…

• Sensibles

Hendrick’s con pepino y pétalos de rosa

Añadir estos dos sorprendentes, y campestres, ingredientes a Hendrick’s no es casualidad, ya que la propia ginebra los incluye en su fórmula original. El resultado es, lógicamente, muy floral, con notas dulces que lo hacen muy femenino.

• Con Personalidad

Beefeater 24 con pomelo y perejil

A esta compleja ginebra, elaborada con naranja, limón, almendra, enebro, pomelo, té verde, té Sencha japonés… le va muy bien el toque de pomelo, y el contrapunto que le da el perejil, que tiene que ser muy sutil.

• Experto

Martin Miller’s con lima y enebro

Posiblemente una de las mejores ginebras que podemos encontrar hoy en día, y para disfrutarla plenamente, que mejor que un sutil toque, a modo de Twist”, de corteza de lima fresca.

• Ecologista

Gin Mare con Romero y haba Tonka

Otra ginebra de nuevo cuño que se aleja de los cánones impuestos por “Imperio Británico”, para apostar en su elaboración por sabores plenamente mediterráneos: romero, olivo, tomillo, albahaca…

¿Donde...?

• Mediterraneo, Benajarafe. (N-340) Quizá a este restaurante le falta glamour... pero le sobra autenticidad, se come muy bien, tiene terraza y preparan uno de los mejores Gin Tonics que he probado en mi vida. Además disponen de interesantes referencias, tanto en ginebras, como en tónicas. 

• DeMolde, Málaga. (c/ Tomás Heredia 4) Aparentemente es una tienda de “sándwiches”… pero la pasión de Sergio por este cóctel le ha llevado a ofrecer a sus amigos una considerable colección de ginebras. Perfecto para ir a media tarde.

• Dom Vinos, Málaga. (c/ Toquero 1) Encantadora y reducida taberna en la que Antonio, tras un excelente “picoteo”, nos sorprenderá con sus impecables propuestas maravillosamente servidas.

• Gin Tonic, Málaga, Situado en c/ Sancha de Lara 4, acaba de abrir nuevo local en La Malagueta (Arenal 8), su nombre es toda una declaración de principios que ha calado entre la afición. Uno de los lugares de moda.

• Irish Times, Málaga. (c/ Fernando Camino esquina con c/ Puerto) Un Pub irlandés que dispone de 69 ginebras distintas, algunas de ellas auténticas joyas, muy difíciles de encontrar.

• O’Clock, Madrid (c/ Juan Bravo 25) Ofrecen casi 100 referencias de ginebras y un concepto a tener en cuenta, el “Baby Gin Tonic”. Una excelente opción si nos encontramos en la capital de España.