domingo, 21 de abril de 2013

Hoteles, restaurantes y ……. tarjetas


Hoteles, restaurantes y ……. tarjetas


La semana pasada estuve en el restaurante Gold en Milán, propiedad de los diseñadores Dolce & Gabbana.  
Un local espectacular, mucho diseño, mucho espejo, muchos dorados que consiguen ser elegantes y no caer en …… Sin embargo, como cliente, lo que más me impactó y lo que me llevé a casa (a parte de la experiencia) fue su tarjeta de visita.
Su tarjeta consiguió cautivarme. Es un lingote de oro para que te lleves a casa. Un lingote de oro de papel de altísimo gramaje. Un lingote de oro brillante, reluciente, donde te puedes ver reflejado. Un lingote de oro para que lo lleves en la cartera y se lo enseñes a un amigo. Un lingote de oro para que recomiendes el restaurante.
¿Damos la importancia que se merecen realmente a las tarjetas de visita?
Sé que no es la primera vez que lees o escuchas sobre esto. ¿Pero lo cumples? ¿Se llevan los clientes la tarjeta de visita de tu hotel o de tu restaurante para trabajar como comerciales gratuitos para ti? Puedes pensar que para eso están los amenities de las habitaciones en el caso de los hoteles, pero lamento decirte que aunque tienen cierto poder, sin embargo no se pueden llevar en la cartera, y aunque en muchos casos se las llevan (para llevarse “parte de la experiencia vivida”), en muchas ocasiones terminan arrinconadas como un recuerdo de comunión o bautizo.
La tarjeta de visita debe, por supuesto, respetar la imagen corporativa, pero ANTE TODO debe tener la cualidad de reflejar y potenciar los atributos de la marca. La tarjeta debe connotar y no ser puramente informativa.

 ¡¡Debe pedirte a gritos que te la lleves!!! Y que la guardes…
Por supuesto deberá cumplir requisitos obvios de calidad, tamaño e incluir todos los datos. Sin embargo, intenta que retenga de alguna manera la atención de tu cliente. En la medida de lo posible diseña una tarjeta creativa, pero que no sobrepase la imagen que ya está creada de la marca.
En la tarjeta de Gold además del oro brillante, que es un elemento que nos anuncia que estamos ante un local de cierto nivel, orientado al lujo y donde te podrás codear con
gente muy “gold”, tanto la calidad del papel como el grabado de la tarjeta nos acercan a pensar que además de estar en un restaurante con mucha imagen, nos van a ofrecer calidad. También nos transmite cierto humor, haciéndonos un guiño a través de la numeración del lingote, que realmente es su número de teléfono. Eso sí, es totalmente innecesario el dato del fax en el reverso de la tarjeta. ¿Es útil para sus clientes este dato?
Evita que la tarjeta de tu hotel o de tu restaurante termine en una papelera. Más aún evita que las tarjetas de visita de las personas de tu equipo que venden los hoteles y los restaurantes acaben en la papelera.

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