Smoothies en la cresta de la ola
En España, porque este auge se debe mayoritariamente al éxito de la implementación del carné por puntos.
En el bar hay que sorprender a los clientes que tienen que conducir… y tenemos la oportunidad de salir del simple refresco o el zumo y pasar a un producto mucho más elaborado, con valor añadido y, por ende, que deje mayor rentabilidad.
La rentabilidad es la gran aliada de la coctelería sin alcohol dado que los “Virgins Cocktails”, como así se denominan estos cócteles, gozan de los mismos precios de venta que los cócteles alcohólicos y su coste variable suele ser menor, por lo que su margen es inigualable. Si además se compara el margen de estos cócteles con los de un zumo o refresco vemos que se gana más de un 400%, dependiendo del precio de venta del cóctel. Y si este beneficio se multiplica por cóctel, por día, por mes y por año… vemos que este tipo de coctelería es un gran negocio.
Los nuevos abanderados de la coctelería sin alcohol son los ‘Smoothies’, que toman el relevo del San Francisco, aunque un clásico nunca muere. Los ‘Smoothies’ son concentrados de fruta repletos de vitaminas, antioxidantes y fibra, que se distinguen a simple vista porque tienen una mayor consistencia y cremosidad que un zumo normal; llegando a tener una textura parecida a un ‘frozen’ suave, pero no tiene hielo en su interior, que sí es necesario para lograr una textura ‘frozen’ en licuadora. Su textura se logra con las mismas frutas y verduras. Por ejemplo si se añaden frutas como la mora, ésta por su alto contenido en betacarotenos potenciará el cuidado de la piel, si se eligen naranjas y fresas se pondera la prevención del envejecimiento por su fuente inagotable de vitamina C. Obviamente sus efectos se consiguen a partir de 4 ‘Smoothies’ por semana… pero indudablemente elegir un ‘Smoothie’ es elegir cuidarse, y esto el cliente cada día lo tiene más presente.
Según un estudio elaborado por Hero y la Sociedad Española de Nutricion Comunitaria, ingerir una cantidad diaria de un cóctel de este tipo protege de algunas enfermedades. En fin, como ‘bartenders’ podemos inculcar que la coctelería también puede cumplir una función que va más allá de la simple percepción del cóctel, un cóctel puede ser delicioso y potenciar la belleza y la salud. Los clientes valoran que les cuidemos. Nuestra misión como ‘bartenders’ es atender bien a todos los clientes y profundizar en sus valores para fidelizarlos cada vez más. Quizás un grupo de personas viene a nuestro bar porque uno de ellos ha insistido en que quiere probar estos cócteles funcionales, es tu oportunidad para hacer todos los cócteles que te pidan, funcionales o no, de manera excelente.
Un tipo de coctelería no empaña a la otra, sino que se potencian entre sí, y muchas veces las nuevas tendencias son el gancho a mercados mucho mas grandes.
¡Bienvenidas las nuevas tendencias!
Diego Arnold (Drinksmotion)
En el bar hay que sorprender a los clientes que tienen que conducir… y tenemos la oportunidad de salir del simple refresco o el zumo y pasar a un producto mucho más elaborado, con valor añadido y, por ende, que deje mayor rentabilidad.
La rentabilidad es la gran aliada de la coctelería sin alcohol dado que los “Virgins Cocktails”, como así se denominan estos cócteles, gozan de los mismos precios de venta que los cócteles alcohólicos y su coste variable suele ser menor, por lo que su margen es inigualable. Si además se compara el margen de estos cócteles con los de un zumo o refresco vemos que se gana más de un 400%, dependiendo del precio de venta del cóctel. Y si este beneficio se multiplica por cóctel, por día, por mes y por año… vemos que este tipo de coctelería es un gran negocio.
Los nuevos abanderados de la coctelería sin alcohol son los ‘Smoothies’, que toman el relevo del San Francisco, aunque un clásico nunca muere. Los ‘Smoothies’ son concentrados de fruta repletos de vitaminas, antioxidantes y fibra, que se distinguen a simple vista porque tienen una mayor consistencia y cremosidad que un zumo normal; llegando a tener una textura parecida a un ‘frozen’ suave, pero no tiene hielo en su interior, que sí es necesario para lograr una textura ‘frozen’ en licuadora. Su textura se logra con las mismas frutas y verduras. Por ejemplo si se añaden frutas como la mora, ésta por su alto contenido en betacarotenos potenciará el cuidado de la piel, si se eligen naranjas y fresas se pondera la prevención del envejecimiento por su fuente inagotable de vitamina C. Obviamente sus efectos se consiguen a partir de 4 ‘Smoothies’ por semana… pero indudablemente elegir un ‘Smoothie’ es elegir cuidarse, y esto el cliente cada día lo tiene más presente.
Según un estudio elaborado por Hero y la Sociedad Española de Nutricion Comunitaria, ingerir una cantidad diaria de un cóctel de este tipo protege de algunas enfermedades. En fin, como ‘bartenders’ podemos inculcar que la coctelería también puede cumplir una función que va más allá de la simple percepción del cóctel, un cóctel puede ser delicioso y potenciar la belleza y la salud. Los clientes valoran que les cuidemos. Nuestra misión como ‘bartenders’ es atender bien a todos los clientes y profundizar en sus valores para fidelizarlos cada vez más. Quizás un grupo de personas viene a nuestro bar porque uno de ellos ha insistido en que quiere probar estos cócteles funcionales, es tu oportunidad para hacer todos los cócteles que te pidan, funcionales o no, de manera excelente.
Un tipo de coctelería no empaña a la otra, sino que se potencian entre sí, y muchas veces las nuevas tendencias son el gancho a mercados mucho mas grandes.
¡Bienvenidas las nuevas tendencias!
Diego Arnold (Drinksmotion)
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